jueves, 28 de abril de 2011

Etimología de Setenil. Introducción.

Nota introductoria.
Debo, antes de nada, dar las gracias a los seguidores del blog.
También debo pedirle -casi suplicarles- que tengan paciencia, porque "parir" cada entrada me cuesta "sangre, sudor y lágrimas" , más que nada porque carezco de tiempo libre suficiente para poner por escrito y medio ordenar las ideas, notas y conocimientos adquiridos en estos años. La ventaja del blog es que sobre la marcha puedo ir añadiendo o modificando según avanza el conocimiento sobre una materia. No pretendo "dogmatizar" sobre cada tema, ni mucho menos. Antes bien, ir dejando ideas sobre temas concretos, y crear un caldo de cultivo para el diálogo.
 La génesis de de este blog, en su mayor parte se la debo a Rafael Vargas (http://setenilrural.blogspot.com/) y a Jesús López, (http://cisbsetenil.blogspot.com/)  que me han "picado" involuntariamente, lo reconozco, con sus respectivas aportaciones
 La "puntilla", por así decirlo, se la debo a Rafael Domínguez, ( http://setenilhistoriaynumismatica.blogspot.com/)  a quien conocí hace muchos años a través de Frasquito (de la tasca Frasquito, en las cuevas del Sol) , y con quien compartí algunos momentos en la fase previa de la excavación de urgencia de la c/Calcetas y años antes. Seguramente Rafael no se acuerde, pero me llevó varios días de excursión por  varias zonas de Setenil que él se conoce muy bien, para ver ruinas y áreas arqueológicas que el conocía sobradamente. De esto ya daré noticia puntualmente en ulteriores entradas, ya que me dió material suficiente para entender bastantes cosas de nuestra localidad. Agradezco también algún comentario recibido o leído que dice más o menos que en poco tiempo están conociendo, gracias a tantos blogs, más noticias sobre Historia de Setenil, que en los últimos veinte años (atendiendo a las noticias publicadas en papel, se entiende)

Acerca del nombre de Setenil. Introducción.
La etimología de una localidad sirve en muchos casos para explicar el origen del lugar. Por poner un ejemplo andaluz, La Carlota (Córdoba) y también La Carolina  (Jaén) aluden al rey Carlos III, quien fundó estas localidades (refundada en el segundo caso) y repobló estas zonas. La etimología y las fuentes históricas explican sin duda el nombre de estas localidades. Sin embargo, la toponima, meramente, no nos dice nada de los pobladores de estas localidades (inmigrantes centroeuropeos, bávaros, y de varias regiones españolas).
En otros casos, es la arqueología la que explica la fecha de un núcleo poblado, siendo el nombre del lugar el que puede aportar datos añadidos sobre los pobladores. Siguiendo con los ejemplos, Acinipo, aquí mismo, gracias a las campañas arqueológicas se conoce su pasado como importante núcleo desde el neolítico y el bronce, prácticamente contínuo durante las etapas protohistóricas y prerromanas. Gracias a la ceca que poseyó conocemos las monedas allí acuñadas , donde figura su nombre, así como en algunas inscripciones y fuentes históricas es mencionada hasta el s. IV después de Cristo (Leo de Acinipo, quien  acude al concilio de Iliberis-Elvira, Granada)  En este caso no hay dudas entre las fuentes y su localización geográfica. La etimología, en cambio, es la herramienta que nos dará pistas sobre el origen : Acinippo no es nombre romano, aunque deba a éstos su esplendor, sino de la descrita por Plinio como la Beturia Céltica ( tienen sus localidades en común el sufijo –ippo o –briga)
Se dan casos también de topónimos conocidos por fuentes históricas, pero de dudosa localización geográfica. Sería el caso de numerosas localidades, mansio o ventas que jalonaban las vias romanas y son citadas por los diversos itinerarios, pero que los historiadores dudan a la hora de asignarlos a algún núcleo actual o ruinas conocidas.

El caso de Setenil
Acerca de Setenil, historiográficamente, han habido dos corrientes a la hora de interpretar el orígen de la población.
Por un lado, una sitúa los orígenes en algún momento de época romana o tardorromana. Por el otro, lo sitúa en el mundo musulmán. Hasta la fecha los apoyos han sido, en el primer caso, la cercanía de Acinippo y los restos romanos diseminados por el municipio; En el segundo, la innegable evidencia de la fortaleza musulmana y las fuentes históricas. En ninguno de los casos hay consenso sobre el significado de “Setenil”.

Ordenando desde un origen cronológico más antiguo hasta el más moderno (en cuanto a fundación, por así decirlo, del núcleo poblacional. No me refiero a la aparición en escena de la teoría expuesta) los historiadores locales han propuesto las siguientes hipótesis:

“Lacippo”.
Cuenca, Madoz y después Chaos localizan Lacippo en Setenil. Para derivar el topónimo, Chaos hace una simpática pirueta conceptual donde de Lacippo se derivaría “Lacisetapoli”, ciudad de cazadores de conejos con lazos de cerda. De Lacisetapoli, por pérdida del prefijo, (como cosa unilateral, sin demostración) quedaría en Setapoli, y después Setenil.
Actualmente se localiza sin duda Lacippo en Alechipe (alrededores de Casares,Málaga), siendo muy directa la derivación de un topónimo desde el anterior. Epigrafía varia, además, apoya sin problemas la correcta ubicación.
Las localidades con sufijo “ippo” son muy comunes en la conocida como Beturia céltica ( Lacippo- Alechipe, Acinippo-Ronda la Vieja, Hippe (¿Olvera?, habiendo sido brillantemente estudiada su problemática por Francisco Villar (Indoeuropeos y no indoeuropeos en la Hispania prerromana. Ediciones de la Universidad de Salamanca. Año 2000 )

“Tebensis Municipium”
Pérez Aguilar, (médico de Montecorto conocido por sus estudios sobre el taller calcolítico del Moral, entre otros), sin otra razón que la similitud fonética, por una mala lectura de una inscripción sita en Acinipo, cree leer Tebensis Municipium, y hace derivar de Tebensis a Setensis, Más detalles de la lectura errónea y toda la polémica subsiguiente en " Carmen Díaz Valera: Epígrafe Latino de Acinippo. Extracto de la revista Jábega, nº 28, año 1979. Diputación de Málaga. )

“Yete”/”Jete”
Diego Rivera expone en su libro “Ronda fue Bobastro” que en el año 923, en un intento del califa Al Nasir Abderramán III por tomar Bobastro, atacó todas las fortificaciones que la rodeaban. Conquistó todas excepto Jete o Yete, inexpugnable. Pactó con Ibn Hafsún (el famoso rebelde mozárabe) la entrega de este castillo y el de Munt Maior a cambio de un período de paz. Para el autor (la anécdota y ocurrencia es suya, no hay fuente histórica que lo corrobore) Jete, obtenida por el califa de esta manera, fue objeto de mofa entre los cristianos, quienes –supone- hacían el comentario de “ ¿Yete?, nihil.. " , es decir, " Jete,nada ¡" . Del "Yete nihil"  se pasaría al Setenil.
La explicación dada tiene dos serios problemas: La primera es que depende exclusivamente de que Ronda fuera Bobastro, y esta hipótesis no la defiende actualmente ningún investigador ( Ronda es la Arunda prerromana y romana). Si , pese a ello mantuviéramos la explicación para Setenil, cabría preguntarse porqué los cristianos no se mofaban también respecto a Munt Maior (latín: monte mayor, localidad de Montemayor, cerca de Benahavis), con un “¿Munt Mayor? Nihil!”. Esta hipótesis, de cualquier modo, utiliza el nihil (latín: nada) como sufijo, que sin duda influenció al autor  por otra hipótesis cronológicamente anterior (la del “Septem nihil”) que después analizaremos.
El autor, por otro lado, en el mismo libro, explica que como el califa estaba dolido por las burlas de los cristianos (que recuerdo de nuevo es una ocurrencia suya) con lo del "Jete nihil" , fundó un castillo para vigilar Bobastro, y le puso de nombre, con cierto retintín un “ pese a todo, Jete” , que es "At Jete" , y de aquí “Atajate”. Comprenderá el lector que esta teoría no se mantiene. Si Ronda no es Bobastro, Setenil no es Jete, ni Atajate tiene este topónimo por capricho de un califa, etc. Es una teoría lo que se dice llevada por los pelos.

“Xaldenil”
del árabe Sâtt denil, ribera gozosa o entretenida. Mantenida por Rossety.

“Xatenil, Xetenil”
del árabe Sâtt an.nil, ribera del añil, y también Sath an.nil, terraza del añil, similar a la anterior, propuesta por Suárez Japón y Ramos Santana. Hubiera evolucionado a Çatannil (pronunciado satanil) y sin dificultad a Setenil. Como apoyo a su teoría, en el Reino de Granada se producían sedas y tintes , a partir estos de las cochinillas, obteniéndose el color índigo o azul. Suponiendo que Setenil hubiera sido un importante centro productor de tintes, el nombre podría provenir de su industria.
Tiene a su favor esta teoría que deriva muy bien el topónimo actual desde el supuesto árabe. En contra, que ninguna fuente cita (hasta donde yo sé) a Setenil como productora de tintes.
No obstante, se da la curiosa circunstancia de que estos autores desconocían al plantear esta hipótesis que existen ruinas de lo que parece una tintorería a escasamente un par de kilómetros del centro de Setenil. Este hallazgo abre una interesante posibilidad: que los musulmanes denominaran a Setenil como tal por la existencia previa de industria de tintes. Para apoyar esta tesis habría que demostrar que las ruinas citadas son realmente de una tintorería y además romana o tardorromana, y no solo una, sino que tendríamos que encontrar un número significativo como para que la localidad mereciera dicho nombre. Por la misma razón , en este caso demostrada, el nombre del río Guadalporcún, deriva de Wad al porcum “río de los cerdos”, siendo latino el “porcum”. Si los musulmanes denominaron así al río es porque tendría abundancia de cerdos hozando, y no de ellos precisamente, ya que es sabido que es animal impuro para su religión.

“Xatanil”
Con el significado árabe de “diablillo”, “demonio chico” y similares. Fue esgrimida por Igartuburo.

“Septem nihil”
Alude al latín siete-nada, y supone que significa que esta localidad se sitió siete veces sin resultado.
Extrañamente a la razón, es una de las teorías más extendidas en la cultura popular, posiblemente por ser de las primeras , expuesta (aunque manifestando serias dudas) por los hnos. De las Cuevas hace ya más de cuarenta años. Otra de las curiosidades de esta teoría, es que su autoría es desconocida. La vuelven a mencionar Suarez y Japón en 1983.
Si se analizan cuidadosamente las fuentes, Setenil (que históricamente ya se cita como “Setenil” desde el s.XIII ) fue sitiada dos veces, tres si añadimos una hipotética en el siglo X (la que es denominada por Diego Rivera como Jete o Yete ). No es de razón ni de sentido común que Setenil tenga este nombre derivándolo de un latino Septem nihil (siete nada, siete veces nada) al primer asedio históricamente documentado, o al segundo, etc. Es como decir (perdone el lector la chanza o broma) que me llamo patizambo porque ando con las piernas abiertas, y resulta que me pusieron el nombre recién nacido, cuando ni yo andaba todavía ni se sabía aún cómo iba yo a andar. Es una de las explicaciones más absurdas que se han dado en todas las posibles lecturas del topónimo.
Los sitios documentados son, a lo sumo, tres, de ellos, los dos más fiables son los de 1407 y el definitivo de 1484. En cualquier caso , sean dos o tres, en todos estos casos las crónicas se refieren a Setenil como tal. ¿Dónde se ha visto que sin haberla tomado ya se aluda , y en latín, al número de veces que no se pudo tomar? (Ver colaboración en: http://setenilrural.blogspot.com/2010/09/las-armas-del-asedio-de-setenil-en-1407.html )

(continuará)

miércoles, 20 de abril de 2011

Ad septem milia

"Ad septem milia" es lo que diría un  paisano de hace dos mil años a cualquier viajero que cerca del cruce de Arunda y Acinipo quisiera ir hacia la zona de Urso. "Ad septem milia" desde esa primera encrucijada ,  hay una aldea, un pequeño núcleo poblacional que no tiene aún nombre, pero que acabará siendo medianamente importante cuando caiga el Imperio romano de Occidente y se convierta en un bastión fortificado bizantino. Ad septem milia, es decir, a siete millas romanas, tienes una "mansio", una especie de "Venta", donde reposar, dar de comer a tus caballos y a tu propio cuerpo.
A siete millas desde ese cruce, siguiendo una de las innumerables calzadas romanas, encontraremos lo que es actualmente Setenil . Ad Septem milia...Septem milia...Septem mil...Settenil...Setenil
En la siguiente entrada demostraremos, como Dios manda,y después de unos años de trabajo, el porqué de esta hipótesis. Ad Septem milia es el nombre de este blog, porque es el que dio lugar al nombre de nuestra Villa
Abrazos a los seguidores de este blog.
Pax et Bonum
Juan Ignacio.